EPOC

16/03/2015
se caracteriza por un bloqueo persistente del flujo de aire, es decir, es una enfermedad pulmonar que impide la respiración normal. Las dos formas principales son la bronquitis crónica y el enfisema pulmonar.
Los síntomas más frecuentes son la tos persistente, la falta de aire especialmente al iniciar una actividad física leve, lo que conduce a la aparición de fatiga; la expectoración anormal y las infecciones respiratorias frecuentes.
Esta enfermedad afecta en la actualidad casi por igual a ambos sexos, a pesar de que hasta hace poco era más frecuente en los hombres. Esto se debe a la principal causa: el humo del tabaco, que afecta tanto a fumadores activos como fumadores pasivos, especialmente aquellos expuestos al humo desde edades infantiles.
El diagnóstico de la enfermedad se realiza generalmente pasados los 40-45 años, a pesar de que los síntomas pueden aparecer en edades tempranas.
Hay que tener en cuenta que no es un proceso reversible, es decir, no existen medicamentos encaminados a curar la enfermedad, sino a aliviar la sintomatología anteriormente descrita.
Sin embargo, existen estrategias eficaces de prevención y control de la EPOC entre las que se encuentran la abstención de del hábito de fumar y la exposición continua al humo, la dieta equilibrada, y la realización de ejercicio físico.
¡Frente al humo del tabaco, protejamos a nuestros mayores!
Cristina Parra Enfermera Centro de Día Vitalia Ferraz