Cómo elegir un buen psiquiatra
29/03/2021
Características que completan a un buen psiquiatra.
Naturalidad
Posiblemente, uno de los factores más importantes para que un psiquiatra resulte agradable a sus pacientes sea que se muestre natural. Resulta más fácil confiar en una persona que aparenta estar relajada, es simpática y se comporta con autenticidad. Además de esta cualidad, de mostrarse tal cual uno es, existen otros atributos personales que los psiquiatras deben intentar cultivar y entrenar.
Empatía y atención a las necesidades de los demás
Implica prestar atención a la vida emocional de los demás y pensar sobre ella para entender cómo se sienten. Las personas que tienen esta habilidad son capaces de prever cómo se van a comportar otras personas en situaciones concretas. Lo logran “sabiendo“ cómo es ser la otra persona y cómo le afectan las emociones a su comportamiento.
Curiosidad
La curiosidad nos puede llevar a querer conocer más sobre la vida de otra persona, sobre su biografía y sobre cómo experimenta el mundo. Este rasgo de personalidad está muy relacionado con el punto anterior. Ya que las personas curiosas van a poder recabar la información necesaria para poder ser empático con la otra persona.
Calidez y ausencia de prejuicios
Es importante que a los psiquiatras les gusten las personas y el trato con ellas. Algunas personas prefieren, por el contrario, tratar con animales u ordenadores, antes que con personas. El psiquiatra no debe juzgar la forma de ser o el estilo de vida de una persona. El cometido del psiquiatra no es el de hacer de ella una mejor persona, sino el de mejorar su salud mental.
Estoico
Cuando acudimos a un psiquiatra confiamos en que no se va a escandalizar de escuchar nuestro problema. Esperamos que nos escuche atentamente, pero también transmitiendo calma y serenidad. No queremos decir con ello que el psiquiatra no pueda en un momento dado mostrarse preocupado, nervioso o triste. Es necesario que la personalidad del psiquiatra le permita mostrar sus emociones al paciente, pero de forma controlada y congruente con la situación.
Tolerancia a la incertidumbre
La psiquiatría está plagada de incertidumbres ya que no existen pruebas que confirmen los diagnósticos ni que certifiquen las respuestas a los tratamientos.
Nos guste o no, la psiquiatría está llena de incertidumbre. Los psiquiatras deben tomar decisiones basadas en la información que transmite el paciente y no se tienen pruebas diagnósticas que confirmen las sospechas. Los tratamientos que se emplean son lentos y, hasta que no hacen efecto, no se puede saber si han sido los adecuados. A veces, pueden pasar meses, hasta que se puede comprobar si se ha acertado con el tratamiento. Por ese motivo, es muy importante dedicar tiempo al paciente, hacer las preguntas adecuadas y escuchar empáticamente.